Libro: La forja de un rebelde - 03 La llama - Barea, Arturo

La forja de un rebelde - 03 La llama

Barea, Arturo

Arturo Barea completó con "La llama" la trilogía "La forja de un rebelde", obra autobiográfica y que nos permite conocer de primera mano la historia de España en los albores del Siglo XX.

En esta ocasión el tema es, inevitablemente, la Guerra Civil, una guerra que nos ha sido contada infinidad de veces, pero con escasa objetividad en casi la totalidad de ese infinito. Por eso este libro es, como documento histórico, una auténtica joya de obligada lectura. Por que en él, Barea realiza un ejercicio descriptivo de la situación en la España de preguerra y de batalla imprescindible.

A pesar de que Barea no combatió en el frente, sí estuvo muy involucrado en el aparato de propaganda republicana. De hecho, era el responsable de censura periodística del Gobierno. De sus manos salía lo que la República quería mostrar al pueblo y se quedaba aquello que consideraban que era mejor desconocer. Y desde su trabajo observa, con una prosa soberbia, todo aquello que acontece a su alrededor. Su lado humano se ve también reflejado, describiendo sus problemas personales de una forma sentida. No es casualidad que durante la guerra conociese a su última mujer, que fue, precisamente, la que tradujo esta obra al inglés, idioma en el que apareció en su primera edición (en España estuvo prohibida durante el franquismo).

Y lo que Barea observa es que, a pesar de ser republicano, tan malos eran los unos como los otros. Tan repugnante era la guerra en un bando como en otro. Tan falta de sentido, tan estúpida, tan cruel, tan repugnante es la guerra entre iguales (y entre desiguales). Fragmentos en la obra que podría reseñar hay miles, porque cada página es un trozo de historia, pero quiero quedarme con uno que me parece muy significativo: "Todo a mi alrededor era destrucción, repugnante y asquerosa como una araña pisada; y era la destrucción de un pueblo; la destrucción bárbara de un rebaño de gentes azotadas por el hambre, por la ignorancia y por el miedo de ser, sin saber por qué, espachurradas, destruidas". Sin duda, en este pequeño párrafo Barea disecciona la guerra y la pone en el lugar que le corresponde.

Una España asolada por las bombas, asediada por las tropas, destruida desde dentro. Un ejemplo de lo que no debe olvidarse para no repetirlo. Pero contada desde entonces, cuando todavía los rencores por el franquismo eran algo desconocido, cuando ambos bandos se sabían perdedores fuera cual fuese el resultado, cuando todavía no había nada que manipular por los políticos de un pasado que era presente. Cuando todavía no habíamos nacido España se rompió en dos. Cuando un pueblo olvida su historia, tiende a repetirla, pero cuando la manipula, hace de su capa un sayo y la vende a precio de saldo en el supermercado de la incultura , entonces prostituye su pasado, su presente y su futuro.