Quemada viva

Esta es la historia de Souad, una mujer cisjordana que sobrevivió a un crimen de honor (Jarimai al Sharaf).

Haber nacido mujer en un pueblo de Cisjordania, en un parte del mundo, en una sociedad del mundo, en donde la vida de una mujer puede ser peor que la de los animales. Hasta Souad misma se recuerda de una frase de su padre, en donde el valorar más la vida de una oveja o de una vaca que una hija porque «Al menos ellas dan leche y lana».

Actualmente se encuentra refugiada en Europa, donde llegó gracias a la ayuda de una cooperante francesa que trabajaba con niños en Palestina e Israel, porque si se descubriera que sigue viva su familia volvería a perder el honor. Eso significa que otra vez estaría condenada a muerte.

Son pocas las mujeres que consiguen salvarse de un crimen de honor huyendo a otro país. Sin embargo, muchas de esas pocas mujeres mueren en el extranjero al ser descubierta por alguien que las conocía.